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Puede que seas un buen conductor, siguiendo todas las reglas de tránsito correctamente, pero hay más que eso para conducir de manera eficiente. Por eso, traemos una serie de consejos que te permitirán conducir de la manera más económica posible, reduciendo las emisiones de CO2 de tu coche y aumentando la seguridad tras el volante.
Acelerar suavemente: Cuanto más aceleres, más combustible consumirás. En la ciudad, puedes usar menos combustible al presionar suavemente el pedal del acelerador.
Mantener una velocidad constante: Cuando tu velocidad desciende y aumenta, usa más combustible y gasta más dinero del que necesita, lo mejor es mantener una velocidad estable la mayor parte del trayecto. Considera usar el control de crucero para conducir en la carretera, donde las condiciones lo permitan.
Anticipar el tráfico: Mira hacia adelante mientras conduces para ver qué se avecina, y mantén una distancia cómoda entre tu vehículo y el que está en frente. Al observar de cerca lo que hacen los peatones y otros automóviles e imaginar lo que harán a continuación, lograrás mantener una velocidad más estable y usar menos combustible. También es más seguro conducir de esta manera.
Evite ralentizar el vehículo: Apaga el motor cuando el coche esté parado por más de 60 segundos, excepto al estar en el tráfico.
No lleves peso innecesario: Quita artículos como equipaje de más, cajas, objetos en la maletera y equipo deportivos.
Retira los portaequipajes de techo o de la bicicleta: Agiliza el coche quitando los estantes cuando no los estés usando, ya que aumentan la resistencia aerodinámica del coche.
Comprobar el estado general del coche de manera regular: Esto va desde los niveles de aceite, agua y el líquido de los frenos hasta la presión de los neumáticos y el nivel del líquido limpiaparabrisas.
